4
segmentos de la población con marcadas complicaciones
económicas. La pandemia de COVID-19 contribuyó a
complejidades tales como, el desempleo, la informalidad,
trabajo no adecuado, emigración, entre otras. Las
circuntancias dificiles para dichos segmentos
poblacionales se potenciaron, dado que debieron enfrentar
la COVID-19 con un presupuesto limitado, e incluso en
varios casos inexistente (Siimsen et al., 2023).
Varios gobiernos en el mundo ofrecieron rápidamente
paquetes de estímulos para su población, como medida
reactiva ante la pandemia COVID-19. La acelerada
velocidad de reacción de los gobernantes fue fundamental
y evidenciada, como un evento histórico y de lecciones
económicas más importantes. Su magnitud se puede
comparar con la Gran Depresión afrontada por los Estados
Unidos de América en la década de 1920. Los Estados
deben reaccionar rápidamente para protegar a los
emprendimientos, a las personas y a las comunidades por
medio de la adaptación de su marco normativo y
estructura organizacional (Lavoie, 2022).
3.3. La pandemia COVID-19, la investigación científica
y la vacunación
Un adecuado grado de respuesta de la ciencia ha sido
documentado con respecto al desarrollo de
investigaciones sobre la COVID-19 (Verdugo-Paivaa et
al., 2022). Ha habido una generación abundante de
artículos científicos sobre el génesis y la evolución de la
pandemia, lo que incluso llegó a derivar en una
complicación para los lectores al no poder seguir el paso
de la publicaciones por su alta magnitud y frecuencia de
publicación.
Ademas, ha habido una expansión en el conocimiento
médico correspondiente a la COVID-19 (Carretero,
2023). En los dos primeros años de la pandemia, se
registró la mayor expansión de sus publicaciones e
implican aportes plausibles (Shi et al., 2023). Se ha
enfatizado la necesidad de modificar los modelos
predicitivos vinculados a las infecciones virales, en
función de la interacción disruptiva generada entre los
sistemas sociales y sanitarios. Una exploración de un
nuevo sistema predictivo es necesario amparado en el big
data. La pandemia COVID-19 indujo a la población a
cambiar varios hábitos, entre ellos la frecuencia de
contacto y grado de importancia de la tecnología, con
amplificación en la influencia de su uso y beneficios
colaterales (Farooq et al., 2021).
La humanidad estuvo expuesta a varios mitos e
imprecisiones sobre el proceso de vacunación contra la
COVID-19 (Wood et al., 2023). Esto se constató en
medios no regulados y en las redes sociales, creando una
desaceleración relativa en los procesos de vacunación con
escepticismo e incertidumbre. Esto se dio previo a la
finalización y publicación de los resultados de los estudios
clínicos masivos. Los efectos altamente penetrantes,
impredecibles e inmanegables generados por la pandemia
evidenciaron un problema de gran magnitud y
potencialmente recursivo (Chen et al., 2023).
Hubo complicaciones subjetivas y controversias
inherentes al proceso de vacunación (Zhang et al., 2023).
Estas estuvieron vinculadas a aspectos de la vida del ser
humano, tales como, preferencias morales, creencias
religiosas, e ideologías políticas. La incertidumbre
inherente a los procesos de vacunación fue constante
durante toda la pandemia, con énfasis durante su etapa
inicial. Esto se dio a pesar de las campañas informativas,
la disponibilidad suficiente de vacunas, e incentivos
ofertados por las autoridades gubernamentales.
A pesar de que el proceso de vacunación contra la
COVID-19 fue percibido como exitoso, aún existen varios
aspectos cotidianos que permancen afectados por la
pandemia en el marco de su desaceleración (Takefuji et
al., 2022). Las vacunas de refuerzo han sido de gran ayuda
para la lucha contra las nuevas cepas de la COVID-19. Sin
embargo, para la humanidad es vital reevaluar los
enfoques que proporcionen la inmunidad más duradera.
La aplicación sucesiva de vacunas de refuerzo ha sido
percibida como una estrategia insostenible en el tiempo
por aspectos financieros y logísticos.
3.4. La pandemia COVID-19 y su impacto socio-
económico
Las circunstancias adversas no implican un escenario
novedoso para las empresas y el emprendedor, quienes
históricamente han debido afrontar etapas plagadas de
pesimismo y devastación como ser guerras, terrorismo y
crisis financieras. La pandemia COVID-19 estructuró un
escenario de crisis sin precedente, aunado a que carece de
una perspectiva clara de sus efectos, rebrotes y cepas.
Dicha pandemia ha sida percibida como un asunto
estructural y no será factible de superar en el corto y
mediano plazo. La literatura sobre las estrategias de salida
y la degradación de la gravedad de la pandemia aún es
escasa e implica oportunidades de estudio y de generación
de nuevo conocimiento. Esto es importante y se considera
vital para la reactivación de la sociedad (Otrachshenko et
al., 2022).
La etapa más crítica de la pandemia COVID-19 se ha
terminado (McCaul et al., 2022). Sin embargo, hubo
efectos negativos que generó prácticamente en todos los
aspectos de la humanidad, con énfasis en las naciones de
ingreso medio y bajo. Es necesario disponer de evidencia
de alta confiabilidad, rápida, y comparable para que las
autoridades y sistemas sanitarios dispongan de
información consistente para la oportuna toma de
decisiones. Dicha evidencia es la piedra angular para la
toma de decisiones informadas, y rubustez hacia el diseño
e implementación de políticas y prácticas como salida de
la COVID-19.
Aún cuando la pandemia se percibe debilitada, sus